Algunos efectos de la testosterona en el cerebro

Algunos efectos de la testosterona en el cerebro

Aumenta el nivel de agresividad y competitividad:

La actuación de la testosterona a nivel de amígdala y de sistema límbico en general provoca que el sujeto manifieste una elevada reactividad a estímulos externos, despertándose reacciones agresivas con mayor facilidad, también se ha observado que según aumenta la concentración de esta hormona, el nivel de competitividad de los sujetos tiende a ser mayor.

Potencia la líbido:

Otro de los más conocidos y visibles efectos de esta hormona sexual es precisamente el aumento de la líbido, tanto en hombres como en mujeres, de hecho, es frecuente que se receten parches de esta hormona en mujeres que han perdido el apetito sexual tras la menopausia.

Puede disminuir la capacidad de empatía:

Personas con una cantidad excesiva de testosterona pueden ser menos empáticas, más egocéntricas y con menor capacidad de vincularnos afectivamente, ello se asocia a un posible efecto inhibidor de esta hormona con la oxitocina.

Fomenta la neurogénesis:

Diferentes investigaciones sugieren que la presencia de testosterona provoca el nacimiento y crecimiento de nuevas neuronas, especialmente en el caso del hipocampo.

Las redes sociales y la autopercepción

Las redes sociales y la autopercepción

El mundo de Internet ha generado redes que conectan al mismo tiempo a millones de personas dentro de espacios que inciden en la manera de pensar y sentir, generando dinámicas de apropiación en las que se esperan ciertas actitudes y comportamientos al programar ideas que vulneran a las personas, empezando desde su autopercepción, por esta razón, el tema de la identidad es uno de los ejes más perjudicados.

Desde la incidencia de las redes sociales se vende la idea de que todas las personas son idénticas, felices y perfectas, la exposición constante a las experiencias de vida “perfectas” de todos los demás provoca sentimientos de soledad, depresión y ansiedad y lo peor de todo es que la mayoría de las veces esas publicaciones son mentira, además, hay muchos menores de edad que crecen día con día con estas ideas; esta exigencia se vuelve parte de su cotidianidad al estar rodeados de roles y estereotipos sociales.

Lo más importante es que desde el autocuidado no permitamos que las exigencias del mundo cibernético nos lleven a tener repercusiones psicológicas, eres una persona única y la cantidad de likes o retweets o seguidores no definen a nadie.

El mobbing descendente o bossing

El mobbing descendente o bossing

Dicho fin es la renuncia del trabajador, además, puede ser utilizado como una herramienta de gestión de empresa, de tal forma que se hostiga a todo el personal por el temor que subyace a perder el control, así mismo, otra de las finalidades es generar situaciones de esclavismo laboral, con el fin de aumentar el rendimiento de los trabajadores a toda costa.

Las razones de los agresores para desencadenar el mobbing son varias, la explicación común a la mayoría de los casos reside en que el trabajador que resulta objeto de acoso laboral, es o se ha convertido en alguien que, por alguna razón, resulta amenazante para el grupo o persona que le hostiga, el factor más frecuentemente aducido en los estudios por quienes padecen acoso psicológico en el trabajo son los celos por una competencia o capacidad profesional extraordinaria.

El mobbing puede llegar a causar serios problemas psicológicos y físicos en las personas que lo sufren, lamentablemente estas prácticas siguen siendo muy frecuentes.

Claves para superar la ruptura de pareja

Claves para superar la ruptura de pareja

Como consecuencia de esta, se desencadena un proceso de duelo, con sus fases típicas que hay que elaborar y superar, las fases del duelo, son la negación, la ira o enfado, la negociación, la depresión, y la aceptación, estas etapas no se desarrollan de forma secuencial y ordenada, sino que se pueden entender como un modelo de gestión del dolor y de la pérdida por el que cada persona va transitando.

Para suavizar las consecuencias negativas de la ruptura, lo primero es fortalecer hábitos y rutinas saludables; es un principio básico pero absolutamente fundamental cuidar la alimentación y el descanso, y hacer algo de actividad física, lo siguiente podría ser poner en orden las prioridades sin dejar de lado lo que necesitas tú y lo que es verdaderamente importante para ti, es el momento de dedicarte un tiempo y plantear cosas que quedaron relegadas para otro momento.

Vuelve a definirte como persona, evita aislarte y alimentar sentimientos de soledad y abandono, aprende a confiar más en ti, a darte cuenta de que tú eres para ti la persona más fiable.

Familia y desarrollo infantil

Familia y desarrollo infantil

La familia proporciona al niño las muestras de afecto, aceptación o rechazo, valor, éxito o fracaso, en consecuencia, las familias deben esforzarse por proporcionar los elementos necesarios para un desarrollo integral adecuado.

Dentro de los objetivos que debe alcanzar una familia se encuentran el permitir la socialización del niño y promover el desarrollo de su identidad, para poder hacerlo posible, debe generar un entorno adecuado como fruto de una crianza que permita el desarrollo diversas habilidades, patrones conductuales y valores que lo dejan desenvolverse positivamente.

Conforme los niños crecen van, poco a poco, volviéndose más independientes para realizar ciertas actividades, no obstante, es la familia la que debe proporcionar refugio, alimentación, vestimenta y todos aquellos elementos que requieren para sentirse tranquilos, no basta con compartir lazos consanguíneos o legales con alguien, la familia va más allá de esta estructura.

El Síndrome de la Cabaña

El Síndrome de la Cabaña

Este síndrome hace alusión al temor y vivencias desagradables que se activan en relación a la exposición real o mental a todo lo que suponga salir del contexto y de la situación estrictamente actual o de los últimos meses, optando así por la reclusión como forma de vida deseada ante la percepción de seguridad que conlleva.

El mantener un tipo de vida en el cual dejamos de ser los dueños de la misma para ceder todos los pequeños y grandes pasos vitales al miedo, conlleva una serie de restricciones generadoras de malestar, el miedo percibirá el mundo a su manera, como fuente de peligro, por lo que responderá de la misma forma: sobrevivir es el fin.

Cuando hablamos de supervivencia o de las posibles respuestas al miedo encontramos tres: lucha, huida o evitación, todas ellas conllevan el aislamiento, el cese de apertura a la experiencia, la disminución de la curiosidad y exploración, la limitación vivencial en todas sus formas.

A medio y largo plazo todo lo anterior detonará en un importante malestar generalizado, con una visión negativa del mundo, de terceros y de uno mismo, así como un estado de ánimo cargado de melancolía y agotamiento tanto físico como mental.