Visualiza tu día

Visualiza tu día

Ha publicado varios estudios acerca del impacto que tienen nuestros hábitos sobre nuestro cerebro y la manera que tenemos de comportarnos durante el día, nuestra mente es poderosa, nuestros pensamientos, y las emociones que de ellos se derivan, tienen la capacidad de modificar nuestra realidad tangible.

Expertos dicen que la visualización es un factor primordial para alcanzar el éxito, cuando visualizamos nuestra mente puede hacer que sintamos la experiencia y que con esto ayudemos a que el subconsciente se concentre en hacer todo lo posible por hacerla realidad, recuerda que tu mente no sabe la diferencia entre visualizar y un evento que realmente esta sucediendo, así que para la mente es como si ya hubiera pasado.

Para diseñar tu día simplemente tienes que pensar que es lo que te gustaría que pasara en este día, cómo quieres que se desarrolle, cómo te ves realizando tus tareas, cómo te ves llegando al trabajo, cómo pasarías tiempo de calidad con tu familia o amigos, este es el inicio de la creación de tu día, incluye todo lo que quieras vivir y cómo lo quieras vivir.

Ser positivo influye sobre tu sistema inmunológico

Ser positivo influye sobre tu sistema inmunológico

Que estudia el impacto que nuestra forma de pensar tiene en el sistema inmune, que es el que nos tiene que defender frente a los virus, el sistema nervioso y el sistema endocrino son el sustrato físico a través del cual los pensamientos tienen un impacto en el sistema inmune potenciándolo o inhibiendo su actividad.

Cuando una persona está experimentando un estrés crónico, el hipotálamo libera un neurotransmisor llamado CRF, el cual hace que una glándula de secreción interna, la hipófisis, libere ACTH, la ACTH viaja por la sangre y llega a las glándulas suprarrenales que están justo encima de los riñones y, da la orden para que estas empiecen a liberar en la sangre cortisol, ese cortisol llega a todos los lugares del organismo y tiene la capacidad de inhibir diversas células del sistema inmune.

Es necesario tener una actitud positiva, no se trata de negar la realidad, sino de dar más peso a las soluciones que a los problemas, es muy importante gestionar nuestra mente en situaciones de tanto desafío como la actual, a fin de tener un sistema inmune más robusto.

El poder curativo de las palabras

El poder curativo de las palabras

Los seres humanos hemos sido dotados con la capacidad de hablar. El lenguaje es uno de los regalos que nos convierte en personas, nos distingue de las demás especies. Además de proveernos un espacio de expresión, nos permite el entendimiento con nuestros semejantes. Las palabras nos permiten comunicar nuestras necesidades y emociones, así como comprender el entorno.

Si bien acostumbramos a hablar para decir nuestras necesidades, pocas veces reparamos en cómo lo decimos. O mejor dicho, en lo que conseguimos al hablar. Al ser la plática tan común, tan trivial, minimizamos el valor curativo que tiene entablar un diálogo. O dicho de una forma más fácil: poner en palabras lo que sentimos es un método sanador. Un ejemplo de la importancia que tiene hablar, es cuando la ansiedad desencadena una serie de eventos en nuestra imaginación que podrían evitarse si tan sólo lográramos una comunicación asertiva.

Las palabras son las herramientas más eficaces que tenemos para definir lo que sentimos. Al poner en el lenguaje nuestras emociones las hacemos reales y somos capaces de afrontarlas. Así, resuenan en nuestros pensamientos, de manera que nos permiten entender entendamos qué estamos dando a entender a los demás. Cada palabra nos delimita una emoción, dándole forma y sentido.

Si a ello añadimos que son comprensibles en el mismo contexto para los demás, ocurre el milagro del diálogo. Ahora, si nuestro interlocutor es una persona capaz de escuchar sin prejuicios y suficientemente empática como para entender nuestros sentimientos, es posible que obtengamos una retroalimentación que nos permita crecer. Las psicoterapias son un método que nos permite aprovechar esta función tan simple para encontrar una sensación de armonía y bienestar.

Es por eso que debemos escoger cuidadosamente las palabras que decimos, sobre todo a nosotros mismos, porque tienen la fuerza de permitirnos crecer y también de destruirnos. Eventualmente, nos convertimos en lo que nos decimos que somos, o en lo que nos dice nuestro entorno que nos define. Es fundamental rodearnos de palabras que nos sanen, y de personas que sean capaces de escucharlas.

“No hay tiempo para la desesperanza, no hay necesidad del silencio, no hay espacio para el miedo. Nosotros hablamos, nosotros escribimos, nosotros utilizamos el lenguaje. Así es como la civilización se cura”, Toni Morrison, escritora estadounidense.

Mi pareja ¿Mi propiedad?

Mi pareja ¿Mi propiedad?

Creen que sus familiares y amigos son de su propiedad y lo que es peor, no quieren compartirlos con nadie, nuestra pareja nunca, bajo ningún punto de vista, nos pertenece, somos dos seres individuales que han unido sus vidas para atravesar juntos este sendero.

La falta de amor propio y de seguridad en nosotros mismos es lo que nos hace pensar que la otra persona (que nos hace felices o nos ayuda en ciertos aspectos de la vida) es de nuestra propiedad, la persona afectada cree que en cualquier momento aparecerá alguien para quitarle aquello que tanto ama (o cree amar), que siempre habrá gente mejor, más bonita y más interesante para que la pareja la engañe, etc.

En el caso de que nuestra pareja piense que somos de su propiedad y no haya cambiado con el paso del tiempo, lo mejor será poner tierra de por medio, no somos de nadie, así pues, deberemos ejercer nuestro derecho innato a la libertad, ni pertenecemos a nadie, ni nadie nos pertenece, y comprender esto es clave para mantener cualquier relación basada en el respeto.

Confía en ti

Confía en ti

Esas virtudes y excepcionales capacidades que pueden impulsar tu crecimiento personal, creer en ti mismo es lo que te hace falta para iniciar el camino que te llevará a conseguir lo que deseas, no hay mayor seguridad ni mayor nivel de confianza que el que te aportas a ti mismo.

Albert Bandura, reconocido psicólogo social, acuñó e hizo relevantes aportaciones a un término que siempre debemos tener presente: autoeficacia, es la seguridad en uno mismo a la hora de alcanzar una meta, es la convicción de que tenemos recursos, capacidades y estrategias para alcanzar aquello que deseamos y a su vez, es la seguridad de que podemos hacer las cosas bien.

Confía en ti, confía en tus posibilidades, confía en tus recursos que te han permitido llegar hasta hoy, estás vivo y respiras, con más o con menos intensidad, has llegado hasta aquí hoy, nada será más poderoso que la creencia en ti mismo, cuando tienes confianza en ti no habrá nada que no puedas lograr, quien confía en sí, lleva consigo los rasgos de un verdadero líder, tiene la etiqueta de vencedor y está listo para las mayores conquistas.