por Wolfggan José Reina Huize | 6 Jun, 2022 | Blog
El espacio es importante en la pareja porque permite a ambas personas dedicarse tiempo a ellas mismas (trabajo, amistades, aficiones) sin descuidar a la pareja, convirtiendo un nuevo encuentro en algo satisfactorio, permitiendo nuestra propia realización y fomentando un modo más saludable de vida en pareja, el espacio individual de cada miembro de la pareja es imprescindible.
Muchas personas piensan que las verdaderas parejas deben hacerlo todo en común, que la felicidad está en no separarse en ningún momento y compartir un espacio único a cada instante, sin embargo, a largo plazo, no es sostenible, los celos son los principales enemigos del espacio personal, para mantener la salud mental y emocional hay que tener momentos de individualidad, de privacidad, para mantener lo que nos caracteriza y que también nos hace felices.
Permitir que cada uno disponga de su espacio personal, es sin lugar a dudas una muestra de amor, confianza y complicidad, si somos felices como personas, seremos felices en pareja, pero si estamos frustrados porque no hacemos lo que deseamos, o porque la otra persona siente celos o desconfianza, solo aportaremos infelicidad a nuestra relación.
por Wolfggan José Reina Huize | 3 Feb, 2021 | Blog
No podemos reducir nuestra felicidad al tiempo que pasamos en pareja, somos más que un novio o novia, esposo o esposa, hay más parcelas en nuestra vida que debemos llenar con aquello que nos gusta sin ningún tipo de restricción.
La dependencia emocional con la pareja a largo plazo puede dañar nuestra autoestima, al sentir que sin la pareja no podemos hacer nada, no podemos disfrutar sin ella y además tenemos un miedo constante a que nuestra pareja rompa con nosotros, por ello debemos mantener nuestro espacio personal, ser capaces de vivir más allá de la relación de pareja, hay momentos que necesitamos dedicarlos a nosotros mismos y la pareja lo tiene que entender.
Las relaciones de pareja fusionales o simbióticas, en las que pasamos a ser una sola persona, no son sanas, ya que perdemos nuestra identidad y nos impiden nuestro crecimiento personal, es importante cultivar el espacio de pareja y el espacio personal por igual, de manera que nos desarrollemos como personas individuales para luego tener una vida más plena en pareja.
por Claudia Marcela Salcedo Taborda | 8 Jul, 2020 | Blog
Incuestionablemente la convivencia es un arte, o como lo menciona Enrique Rojas “convivencia es ante todo, compartir, participar en la vida ajena y hacer participar al otro en la propia”. Es importante tener en consideración que muchas parejas toman la decisión de vivir juntos enamorados, por pasiones quizás desenfrenadas, por una familia constituida en “mejores épocas”, por no estar solos, porque es un “buen padre” o una “buena madre” y así sucesivamente.
Todo esto conlleva a que la dinámica sea cada vez más desgastante y nos lleve a situaciones de desamor, desinterés, frustración, infidelidad, dificultades en la comunicación, entre otras pues ese vínculo primordial y necesario para sobrellevar las dificultades propias de esa dinámica de pareja se han ido perdiendo, (sin mencionar que en esta cuarentena muchas parejas ahora comparten una cantidad de tiempo significativamente mayor al habitual y otras variables que detonan habilidades socioemocionales personales que impactan en la relación de pareja).
Estas situaciones pueden hacer que un miembro de la pareja o incluso ambos puedan preguntarse, “¿debo seguir en esta relación?”, “¿quiero realmente convivir con esta persona o solo sobrevivo en esta relación por a, b, c razón?”. Comparto la postura de Walter Riso (2006) quien indica como razones para no seguir las siguientes:
- Cuando no te quieren: Una relación sin reciprocidad es humillante, triste e insana.
- Cuando obstaculizan tu autorrealización: Si no puedes hacer aquello que te haga crecer, vibrar y soñar por tu pareja y no es algo destructivo para ti ni para el otro, puedes estar en el lugar equivocado.
- Cuando vulneran tus principios o valores: El límite de lo negociable es la dignidad personal, y si cedes en principios y creencias fundamentales estás en líneas difusas en que pronto podrías dejar de quererte a ti mismo por querer más a la otra persona o querer complacerle.
Si te sentiste identificad@ con alguno de estos tres aspectos, evalúa lo que quieres y hasta dónde quieres seguir mientras sea sano para ti. Te mereces una sana convivencia y no una supervivencia que mine tu amor propio, tu integridad y tu bienestar. Si por el contrario, sientes que hay aspectos que son susceptibles de mejora de tu parte o la de tu pareja, identifica que podrían mejorar en equipo para una convivencia amena y orientada al crecimiento de cada uno como individuo y de su vínculo.
por Claudia Martínez | 21 Abr, 2020 | Blog
Si yo no soy desead@, buscare a un hombre/mujer muy desead@ o muy sobreprotegid@, para que sus programas se complementen con los míos.
Los mecanismos inconscientes a la hora de elegir a nuestro compañero o compañera tienen mucho poder porque esa atracción viene dada por carencias, deseos u otras características escondidas que conforman nuestra personalidad.
De esta manera no es en vano que nos fijemos en alguien cariñoso si nosotros tenemos, por ejemplo, una necesidad imperiosa de cariño.
Si algo te choca de tu pareja analiza que está diciendo eso de ti, porque los conflictos que tienes con tus parejas, son los conflictos que tienes contigo mismo.
Todo aquello que no aceptas en tu personalidad lo ves en el otro y podrás aprender a través de ella o él, lo que tienes que mejorar en ti.
Muchas personas, tras romper con una relación insatisfactoria, caen en una situación parecida una y otra vez al cabo del tiempo. Esto se debe a que hay un denominador común en estas relaciones, se enamoran de una persona muy similar a su ex pareja y eso lleva a repetir “el mismo patrón”.
Desde la Bioneuroemoción, la Psicosomática Clínica y las Constelaciones Familiares, sabemos que cuando alguien está “reparando” o “reconciliando” este tipo de heridas y carencias emocionales, repetirá el mismo tipo de experiencias que las originó para que puedan hacerse conscientes y liberarse.
Una persona pudiera estar reparando su relación con uno de sus padres. Entonces, el hombre o la mujer pueden atraer como pareja a alguien que simbólicamente represente a ese padre y experimentar la misma problemática que vivió con él..
Como por ejemplo el caso de un niño que pierde a su madre (alcohólica) quien lo maltrataba, y de adulto solo se une a mujeres agresivas que lo maltratan igual que lo hacía su madre.
Hay infinidad de situaciones que se pueden estar reparando con tu relación de pareja.
Otro ejemplo son los dramas transgeneracionales, como aquellos en los que hubo niños involucrados (temas de abortos, hijos muertos, mujeres muertas durante los partos, hijos no reconocidos, etc.), para lo cual una mujer (o un hombre) pudiera tener un programa inconsciente de “No tener hijos” y por tanto atraerá a su vida parejas con problemas de fertilidad o que rechazan tener hijos. De esta manera se complementan.
Nada es al azar y para sanar nuestras relaciones de pareja, debemos sanar la relación con nosotros mismos.
Tal como dijo Carl Jung:
“Hasta que el inconsciente no se haga consciente, el subconsciente dirigirá tú vida y tú le llamarás destino.”