El síndrome de West

El síndrome de West

Se caracteriza por tres elementos: espasmos epilépticos, retardo del desarrollo psicomotor e hipsarritmia en el electroencefalograma, aunque uno de estos puede estar ausente.

Esta condición se presenta aproximadamente en 1 de cada 4 mil a 6 mil bebés y predomina en el sexo masculino, los niños con síndrome de West suelen manifestar la condición entre los 3 y 7 meses de edad, aunque ha habido casos en los que aparece hasta pasados los 2 años, pese a que se han tenido avances en su tratamiento, ha habido casos en los que no se detecta a tiempo, especialmente cuando los síntomas son leves, ya que las convulsiones se pueden confundir con hipo, cólicos o dolor abdominal.

Las causas que provocan este síndrome pueden ser prenatales, perinatales o postnatales, la terapia de esteroides y el uso de fármacos suelen ser efectivos en el tratamiento de esta enfermedad cuando se detecta en edad temprana, pero en general, tiene un mal prónostico, el 90% de los casos presentan un retraso psicomotor importante, con limitaciones motoras y rasgos de personalidad autista.

Como educar a un niño autista

Como educar a un niño autista

Prepara un espacio para el aprendizaje y procura que siempre se mantenga igual, los niños autistas tienen problemas con los sitios caóticos o cambiantes, deja que el niño cree su propia estructura de aprendizaje, a veces pueden incluir algunos objetos o conductas que les ayudan a retener la información, debes permitir que los use y aprenda a su manera, también debes respetar sus movimientos autoestimulantes.

Todos los niños autistas pueden aprender, lo que necesitan es un método que les ayude a asimilar la información, empieza por no darles órdenes o explicaciones demasiado extensas, los niños autistas también tienen problemas para procesar la información cuando se les presenta de forma oral, es mejor darles las explicaciones de manera escrita, para que puedan leerlas y las asimilen mejor.

El ejemplo de otros niños también puede ser muy útil, los niños pequeños pueden aprender tareas sencillas al ver cómo las realizan sus compañeros, un niño autista puede aprender una conducta al ver a otro niño desempeñándola, por último, haz un horario para el niño que le evite imprevistos, los niños autistas se sienten más seguros siguiendo una rutina diaria.